Me llamo Paola, soy de Argentina y soy mamá de mellizos (nena y nene) y de cuatro chiquis más. Mis mellizos son los mas chicos, tienen 15 meses, Ambar y Augusto.

Desde que llegaron nuestra vida es un caos. Para colmo, al quedar embarazada yo no los esperaba, en realidad no quería más chicos y estaba a punto de salirme un buen trabajo. Me habían preseleccionado y me citaron para los exámenes psicofísicos el día que me enteré de que estaba embarazada nuevamente. Claro, de todos modos yo al enterarme esperaba uno, ¡no DOS!

De más está decirles que el día que me hice la ecografía y me entero estuve todo ese rato con la mano en mi cabeza y no paraba de llorar, claro que no de alegría. Por mi cabeza pasaban miles de cosas; ya no eran 4 hijos, iban a ser seis, ¡SEIS! Para mí era de otra época.

De todos modos el bajón duró poco. Cuando llegué a casa empecé a llamar a mis hermanos y amigos contándoles y ya no con llanto sino muerta de alegría y de amor.

Yo nunca había trabajado, siempre me dediqué a cuidar a mis hijos y estar en casa, pero salió una convocatoria para policías administrativos y me pareció super la idea y me presenté. Nos presentamos 10 mil personas en mi ciudad para 400 puestos y quedé seleccionada para hacer el curso e ingresar.

Si hubiera sabido que estaba embarazada no me hubiera presentado porque no hubiera creído que me iban a llamar. Pero ya estaba en el baile asi que le di para adelante.

Embarazada conseguí ese trabajo. Empecé a trabajar en julio de 2011 y en noviembre tuve que sacar una licencia debido a que tenía que hacer reposo por mi embarazo. Asi fue que mis bebes nacieron el 5 de diciembre de 34 semanas y estuvieron 26 días en Neonatología.

El 31 de diciembre llegaron a casa siendo bienvenidos por sus hermanos Micael de 15 años, Quimey de 11, Maximo de 7 y, mi bebé hasta ese momento, Ignacio de 4. A partir de ahi fue una experiencia totalmente diferente, complicada, difícil pero a la vez hermosa y muy gratificante.

Realmente pensé que no me iba a costar, ya que tenía bastante experiencia como mamá,  pero sí que es muy distinto tener dos bebes recién nacidos a tener uno. Hace 14 meses que no se lo que es dormir toda la noche. Mi casa siempre estuvo super ordenada, limpita, organizada, ¡Ahora es un caos! No es que la mugre nos invada, pero el orden y la organización que antes teníamos ya es imposible de conseguir.

Para colmo, como les había dicho antes, yo siempre me dediqué sólo a mi casa y ahora soy mamá de seis, entre ellos mellis, y trabajo afuera de mi casa. Por ahora son sólo 4 horas, ya que estoy con lactancia en mi trabajo y hasta que los mellis cumplan dos años seguirá siendo asi.

Y otra ventaja es que en el horario que yo trabajo mi marido está en casa. Por lo tanto él cuida a los chicos y ahorramos en niñeras o guarderías. Y también debo decir que mis dos hijos más grandes son dos santos me ayudan un montón y eso me da bastante respiro. Mas de una vez he estado super agotada y mientras descansaba una horita los chiquis me entretenían a los bebes.

A pesar de todo el trabajo y la locura que se vive en casa, día a día vamos mejorando en la organización de nuestra ajetreada vida. Vendimos el auto y compramos una camioneta de 12 asientos, tipo micro escolar y hasta nos fuimos de vacaciones con todo el batallón.

Con mucho amor y mucha paciencia de parte de todos llevamos adelante nuestro familión. A veces es difícil, y más de una noche me he puesto a llorar por el agotamiento, pero luego, al ver a todos mis hermosos hijos y a mi marido que da su vida por nosotros, pienso que si pudiera elegir como quisiera que fuera mi vida elegiria esta la que tengo hoy con mis 6 hijos y mi marido.

Paola, madre de mellizos de 15 meses

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