«Soy madre de trillizos que tienen ahora 8 años. Nacieron con 26 semanas. Son dizigóticos, dos de ellos son gemelos. Los tres nacieron con poco peso (800 y 880 gramos los gemelos, 835 gramos el mellizo). Salieron bien adelante, aunque el mellizo tuvo algo más de problemas.

Los gemelos se relacionan más entre ellos que con él, pero no parece que le afecte mucho. Hay una diferencia, pero no muy marcada.

Lo que me preocupa, es que el mellizo tiende a vanagloriar mucho sobre sus éxitos. Le hemos dicho mil veces que esto no está bien. Parece entenderlo, pero sigue haciéndolo.

En el colegio sigue el ritmo de la clase, pero es sumamente lento. Los tres están cada uno en una clase, así que no tenemos el problema de que se comparen. Los gemelos van muy bien en clase y no tienen este problema de la lentitud. Cuando en casa jugamos algún juego como la oca, a él le cuesta mucho más entender las reglas. También puede influir que en general le cuesta concentrarse.

No sabemos si su desarrollo es normal dentro de una evolución de un niño prematuro. Y nos preguntamos si debemos animarle más o esperar a que recupere su retraso. Por otro lado, a veces nos sorprende con sus comentarios y perspicacia.

Nos duele que no pueda alcanzar el ritmo de sus hermanos, ya que tememos que esto en un futuro le causará problemas. El, de por sí, es muy competitivo. Por cierto, en los deportes es muy bueno, como patinar, hockey etc. Y en estos aspectos les gana a sus hermanos. También tiene talento para la música. ¿Qué opinas?»

Querida Paulina:

En general podemos decir que tus trillizos están muy bien, teniendo en cuenta su prematuridad y bajo peso. Los estudios demuestran que éste es un grupo vulnerable que no pocas veces en el colegio van algo atrasados.

De momento, para tus trillizos no es el caso. Solo el mellizo es algo lento. Ten en cuenta que la inteligencia de gemelos idénticos suele ser muy parecida, por tanto no es raro que haya más diferencia entre los dos y el mellizo, más que entre ellos mismos. En cuanto al tema de ayudarle más, te aconsejo tener paciencia y esperar.

La lentitud puede deberse a una inmadurez del cerebro. Pero como éste todavía está en pleno proceso de maduración, la situación puede mejorar con el tiempo. Forzar muchas veces tiene el efecto contrario. No obstante, me parece muy positivo reforzar en él justo las áreas en las que destaca.

Dale plenas oportunidades para hacer deportes y tocar algún instrumento (el que él elija). Esto le beneficia en su autoestima y le dará una ventaja frente a sus hermanos, lo cual es positivo para él. Así él tendrá su propia ‘parcela’ donde su lentitud no le molesta y él destaca.

Los juegos de mesa de por sí son, no pocas veces, una fuente de tensión entre hermanos. Todos quieren ganar, nadie tiene consideración para el hermano que sea más lento, éste se convierte en el factor molesto…etc. Una idea es jugar sólo a aquellos juegos que él domine bien y si no, dejarlos.

En cuanto a su manía de presumir de lo que ya sabe hacer, puede influir el hecho de que él se vea distinto a sus hermanos. A fin de cuentas los gemelos idénticos tienen un vínculo muy especial e íntimo, distinto al que hay entre ellos dos con él. Los gemelos idénticos entienden el mundo del mismo modo y ven las cosas de la misma manera.

El mellizo intuye esta diferencia. No es fácil para él. Te aconsejo explicarle su origen biológico. Es importante que entienda el porqué de esta situación. Muchas veces el niño que se encuentra en esta situación (digamos el ‘tercer niño’) piensa que es por su culpa que sus hermanos (o hermanas) le quieran menos. Una vez que entiende que no es así, pero que hay una razón biológica, es más fácil aceptar la situación.

Por cierto estos problemas se dan sobre todo entre trillizos dizigóticos que sean del mismo sexo. Cuando el tercer niño es de sexo opuesto, ya por sí ocupa una situación especial en la familia y la sensación de no pertenecer al grupo es menos. Su  manera de presumir de sus éxitos es una forma de decir: ¿Me veis? ¿Me tenéis en cuenta? Estoy aquí’. Una idea para que lo haga menos, es acordar con él una señal que le hagas cada vez que incurre en su ‘error’. Intenta también darle, especialmente a él, atención individual. También tener un íntimo amigo es muy importante para él.

Un saludo cordial,

Coks Feenstra

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