«Necesito un consejo o una ayuda. Mis gemelas entran en febrero al jardín y me piden de que ellas ya más o menos hayan dejado el pañal, pero no es el caso.
Ellas juegan con la taza y pueden estar allí media hora y luego se levantan y se hacen encima o en el pañal.
Además, las dos son un desastre para comer. Si comen solas es más lo que termina en el piso y en su cuerpo que en su boca. Estoy desesperada porque me costó casi un año conseguir el cupo y ahora lo puedo perder. Auxilio.» Andrea.
Querida Andrea:
Siento mucho que estés en esta situación tan apresurada con tus gemelas. No me parece nada ético ni pedagógico manejar este tema de esta manera. De todos modos, esta exigencia es síntoma de la filosofía pedagógica que hoy en día, por desgracia, reina en las sociedades desarrolladas.
A los niños, desde que nacen, se les exige una autonomía y una independencia que muchas veces no corresponde con su edad biológica ni madurativa.
Lo que quiero decir es que es cierto que gran parte de los niños a los 3 años ya controla los esfínteres (no me pones la edad de tus niñas, pero supongo que con 3 años entran en el jardín infantil). Pero también hay un grupo de niños, como por ejemplo los prematuros (entre ellos se encuentran, ¡Los hijos nacidos de un parto múltiple!) que no coinciden con la media.
Entonces, ¿Qué hacemos? ¿Obligar a tus gemelas a que se espabilen y lo aprendan de un día para otro? La presión es un mal consejero en estos temas. Es como decir a alguien que teme las alturas que no tenga miedo y que suba al avión sin sudar y sin taquicardias.
En el control de los esfínteres interviene la madurez fisiológica y psíquica del niño. Está preparado para ello cuando conoce su cuerpo y percibe cuando está haciendo pis. Por tanto, las primeras señales suele ser el hecho de que el niño te cuente algo como: ‘mamá, el pañal mojado’ o ‘mami, tengo pis’ (dando a conocer que ya hizo pis). Esto indica que ya entiende qué es lo que ocurre en su cuerpo.
Sin este conocimiento el aprendizaje no tendrá lugar. Pero cuando ya percibe los procesos de su cuerpo, es bueno colocar el orinal en casa, en un lugar visible, y hacerle sentarse un ratito. Cada día de nuevo en momentos puntuales. Todo de modo agradable y armónico.
Alguna vez depositará algo dentro y es entonces cuando ya empiece a ver qué es lo que quieres de él. Como le encanta verte contenta, se esfuerza para hacerlo otra vez. Pero: las emociones juegan también un papel importante en este proceso. Si la madre está apresurada y tensa, ¡Todo este proceso se dificulta! El niño percibe esa tensión y no lo aprende fácilmente. Debe de haber en casa cierta armonía y serenidad.
Y además, este aprendizaje requiere que la madre (o el padre) esté pendiente de las señales (necesidades) del hijo. Cuando son gemelos o trillizos, es más difícil, porque son varios a los que hay que seguir de cerca. Por tanto, intenta hacer la enseñanza con la gemela que más interés muestre (en el caso de que ninguna de las gemelas muestre interés, no te queda otra que esperar). Dirige tu atención hacia la niña que esté preparada para aprender. Si la otra también de repente quiere, pues estupendo. Si no, no pasa nada. Lo harás con ella cuando sea su momento.
Primero de todo debes relajarte y verlo todo de otra manera. Este aprendizaje no lo podemos forzar, igual como tampoco podemos forzar a un niño a dormir o comer. En otras palabras: sigue con tus intentos, pero sin la perspectiva de que lo vayas a conseguir en un plazo tan corto. Así tú estarás más tranquila y las niñas también. Y a veces, siendo las cosas de este modo, lo aprenden de repente en dos o tres días.
Quizás esperabas de mí un truco mágico que te resolviera el problema de un plumazo. Lo siento, pero no lo tengo ni creo que exista. Pero invito a que otras mamás reflexionen sobre este tema y te cuenten cómo lo solucionaron ellas. Por desgracia, muchas madres se encuentran en la misma situación que tú, algo que lamento profundamente.
Mucha suerte y muchos ánimos. Y sobre todo mucha paciencia.
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yo tngo mllizos d dos años 1 mes ahora recien despues d mas d unmes estoy mas trankila una ya controla esfinter el otro lo siento n la pelela cada 1 hora para k haga aveces es difil complicado pero hablenles con amor enseñenles k se mojo y k debe avisar ami m ha funcionado aun derrepnte se hacen n la ropa pero es normal y como muchas estoy sola enseñandoles y con otra hija d cinco asi que animooo todo se puede…
Llevo preocupandome por este tema un montón con mi peque de dos años y medio, el septiembre empieza el cole y solo de pensar que en verano teníamos que empezar y que él no estuviera preparado, y me echaba a temblar.
Me sorprendió enormemente que el domingo me dijera: Mamá el pañal pica y se sentara en su orinal, ya muestra interés, así que para mi es un gran paso.
Buenos días. A esas edades es normal que tarden, y hay que tomarlo con calama. Pero mi hijo tiene nueve años y jemos probado ya e todo todo, pobrecito mío con la moral por el suelo… Hastq ue me hablaron del pipistop yd ebo deicr que… hija… santo remedio!!! Ya noté la mejoríad esde el primer día. Ahoda estamos a punto de acabar el clclo de los quince días y ya se despierta sólo. Os lo juro, es in-cre-í-ble. Por supuesto hay que descartar primero razones médicas pero si llegáis a los cinco años y no lo conseguís… Vale la pena pagar los 88 eurazos, de verdad. Me dijo una de un foro que compró uno más barato… y al final compró este… Total: encantados estamos!
Hola chic@s. A mis nenes (ya son adultos) logré quitar el pañal de la siguiente manera: Durante unos días los sentaba varias veces al día en el orinal (como si de una sillita se tratara) y me puse a jugar con ellos. Al principio no hicieron ni pipi ni caca pero de esta manera se acostumbraron al orinal. Una vez acostumbrados al orinal, comencé a acostarlos sin pañal. Para q no se orinaran, los saqué (sin despertarlos) cada dos horas de la cuna y los mantenía dormiditos allí sentados en el orinal durante 2-3 minutos. Luego volví a acostarlos. Cada dos horas repetía el mismo proceso. Poco a poco empezaron a hacer sus necesidades dentro del orinal.
Los primeros días son los más difíciles pero no hay que desesperar. ¡Mucho ánimo a tod@s! ya verán, con constancia todo se consigue. Saludos 🙂